Evita la fuga de talento, origen y posibles soluciones
Para poder incorporar nuevos elementos a las empresas es necesario el largo y (en muchas ocasiones) frustrante proceso de selección, pues el objetivo principal de las entrevistas es el adquirir al mejor personal con las características necesarias que cubran por completo el puesto en cuestión. Cuando por fin se ha logrado conseguir a la persona idónea, con las cualidades óptimas para hacer que la empresa siga creciendo y cumpliendo con los objetivos visualizados, es de esperarse que se desee conservar a este elemento por mucho tiempo, pues se conoce el potencial y todo lo que éste puede aportar al equipo.
Después de conseguir al mejor talento, el proceso siguiente será la adaptación de éste, el entendimiento de las normas, la logística y comprensión de todo lo que atañe al puesto conseguido, que conozca a sus compañeros de trabajo y comprenda las funciones de cada uno. Esto, por su parte, comprende una cuantiosa inversión de tiempo y recursos que espera ser compensada con el desempeño del nuevo colaborador. Ahora bien ¿qué pasaría si después de cierto tiempo toda esta inversión se ve reducida a una renuncia sin previo aviso? ¿qué pasaría si este prometedor elemento decide, por cuenta propia, no seguir formando parte de la planilla laboral?
Finalmente, todo el esfuerzo y recursos previamente implementados se verán desaprovechados. De nueva cuenta habrá que emprender la búsqueda por nuevo talento, con el firme cometido de conservarlo, sin embargo, la anterior situación podría repetirse innumerables ocasiones si no se establece una correcta cultura de trabajo, en donde tanto patrones como colaboradores se encuentren satisfechos con los obtenido por cada una de las partes.
Generalidades sobre la fuga de talento
La fuga de talento es, sin duda, un factor determinante para el progreso de una empresa, existen diversas razones por las cuales se origina este problema, pero también existen muchas otras que pueden ayudar a enmendar esta situación, o bien, a evitarla de manera tajante para conservar a los activos que generen diferencias considerables en la productividad de la compañía.
En la actualidad, la rotación del personal está obteniendo un papel muy importante en la toma de decisiones de las empresas, así como en el enfoque que se toma para dirigirse a todos los que forman parte de ella. Ahora el valor de los trabajadores es igual de importante no sólo por cómo realizan sus actividades, sino por todo lo que ellos aportan a la misma empresa. Cuidar de ellos y conservar su lealtad es también uno de los objetivos principales para el área de Recursos Humanos, así como para la misma cabeza que los dirige.
¿Qué lo causa y cómo se puede evitar?
Integración dinámica
Un error frecuente en las empresas es dar por sentado la integración de los nuevos elementos, sin considerar la importancia que este primer paso puede tener en su desenvolvimiento. Cuando un miembro no se siente parte del equipo, trae consigo el desapego y disgusto por ir a trabajar, lo que a su vez puede desencadenar en su pronta partida.
Claro está que el tiempo rinde sus frutos y, eventualmente, el colaborador podrá conocer a sus compañeros, así como la relación que deberá entablar con ellos, en la medida que sus actividades se entrelacen, sin embargo, para agilizar este proceso será de gran ayuda que se fomente la interacción entre el mismo equipo, ayudar a que se conozcan y se rompa la barrera del silencio
Qué hace quién y para qué
Aunado a lo anterior se encuentra la valiosa tarea de hacer saber qué actividad desempeña cada elemento. Considera que mientras mayor sea la claridad en cuanto a las funciones de cada uno, todos sabrán a quién referirse, así se evitarán posibles confusiones, malentendidos e información triangulada que puede sumar tiempo y restar calidad al trabajo que juntos busquen alcanzar.
Estímulos por objetivos
No hay nada más enriquecedor para un talento de calidad que el saber que su trabajo ha sido reconocido, que se están alcanzando las metas visualizadas y que sus habilidades están cumpliendo con lo prometido. Fortalecer este reconocimiento será una herramienta primordial para que la productividad siga siendo de la misma calidad.
Se puede lograr este punto de diversas maneras. Están los incentivos recreativos que abarcan desde recorridos turísticos, degustaciones de menús gourmet, hasta descanso en spa con servicios que ayuden a relajar las agitadas mentes, hasta aquellas recompensas que abarcan la constante formación de los empleados para que sigan creciendo de manera profesional, en este caso bastará decir el sin número de cursos que ahora se ofrecen, tanto de manera presencial como en línea. Los regalos corporativos siempre serán una gran alternativa para ayudar a que tu empresa siga creciendo.
Flexibilidad y empatía
Cuando los colaboradores tienen la oportunidad de reconocer la flexibilidad en cuanto a sus horarios, se sentirán con mayor tranquilidad en caso de necesitar algún permiso y su lealtad hacia la empresa incrementará.
Por otra parte, una estrategia que no sabe fallar es el mantener una buena comunicación con los empleados, entablando pláticas que los acerca más a conocerse y determinar sus necesidades. Tal vez esto no pueda realizarse con tanta frecuencia como se desearía, pero invertir una fracción del tiempo conociendo a los que ayudan a hacer crecer a la empresa será clave para conservar a los elementos más valiosos.
Trato justo, reconocimiento y retroalimentación
Otro factor determinante para que este fenómeno laboral ocurra es que, a pesar del esfuerzo y excelente desempeño de un activo, el trato que se le otorgue no corresponda a sus logros. Observar un trato injusto por parte de sus superiores lo puede orillar a desmoralizarse, entendiendo así que, lo que no recibe en donde se encuentra, lo podrá encontrar en otro lugar.
En relación con el trato justo se encuentra el reconocimiento. Hacerle ver al colaborador que su trabajo cubre las expectativas también es clave para conservarlo por mucho tiempo. Por supuesto que también habrá que hacerle ver las fallas que puedan presentarse en su trabajo, pero es de vital importancia que esas llamadas de atención se lleven a cabo en privado, ya que no querrás perder su confianza si lo consideras como un elemento importante.
Asimismo, para poder lograr este punto con éxito, el encargado deberá mantenerse atento al desenvolvimiento y cumplimiento de las actividades. Supervisar con detalle lo que cada persona realiza, así como determinar las tareas específicas que cada uno debe cumplir.
Bastará con aprender a escuchar a cada uno de los empleados, saber qué tan bien están cumpliendo con sus metas y reconocer todo el valor que ellos aportan a la empresa para evitar la llamada fuga de talento.